Recomiendan desconfiar de ofertas 'demasiado buenas para ser verdad' y usar tarjetas virtuales o de prepago "muy recomendables para compras online"
Una boda en la UCI: Javier y Esther se casan en el Hospital Gregorio Marañón
El equipo médico convierte en realidad el sueño de una pareja, celebrando una emotiva ceremonia en plena Unidad de Cuidados Intensivos Quirúrgica
Javier y Esther han sellado su amor en un escenario poco habitual: la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) Quirúrgica del Hospital Universitario Gregorio Marañón, donde él permanece ingresado desde hace más de dos meses.
La ceremonia tuvo lugar el pasado 20 de junio y fue posible gracias al compromiso del equipo sanitario, que no dudó en volcarse con la pareja. Uno de los protagonistas de esta historia es Cristóbal Ruiz, enfermero de la UCI, quien tras recibir la petición de los novios se puso manos a la obra. Consultó con la jefa de área y los médicos, y asumió un nuevo rol: el de improvisado 'wedding planner'.
"Querían casarse y no sabíamos si daría tiempo. Pero hicimos todo lo posible para que sucediera", explica Ruiz en un vídeo difundido por el hospital en redes sociales.
Claudia Menéndez, médica de la UCI Quirúrgica, relata que todo el equipo recibió la noticia con entusiasmo. "Javier lleva ingresado más de dos meses, y durante este tiempo hemos llegado a conocerle a él, a Esther y a su familia. La boda fue muy emotiva para todos", comenta. "Esto sigue siendo una UCI, donde los pacientes están muy delicados, así que ver algo tan bonito aquí fue muy especial".
El compromiso y la humanidad del personal del Gregorio Marañón convirtieron una situación clínica difícil en un momento lleno de esperanza y amor. La historia de Javier y Esther es, sin duda, un testimonio de que el cariño también cura.
La ONG Amigas de la Tierra pide "limitar" el poder de las empresas y fabricantes y garantizar una mayor vida útil para los bienes de consumo
Los 16 restaurantes que tenían tres estrellas Michelin las conservan en una edición sin grandes sorpresas
Una obra de arte vendida por 5,8 millones de euros termina en disputa familiar: 853.732 euros pendientes entre hermanos y un largo historial judicial








