La jueza le ha citado a petición de la Fiscalía Anticorrupción y tras haber reclamado el contenido de esa declaración prestada en la Audiencia Nacional
Investigada por poner a su nombre el coche de su expareja falsificando la firma
Su expareja presentó una denuncia tras comprobar que su coche, valorado en 21.000 euros, había sido transferido sin su consentimiento
La Guardia Civil investiga a una mujer, de 29 años de edad, como presunta autora de un delito de falsificación de documento público, al plasmar supuestamente la firma de su expareja en los documentos presentados en la gestoría para tramitar la transferencia y cambio de titularidad del vehículo a nombre de la ahora investigada.
Los hechos se han producido Burgos, y fueron denunciados semanas atrás en la Guardia Civil por el perjudicado, al comprobar que el vehículo de su propiedad -valorado en 21.000 euros- había sido transferido a nombre de su expareja sin consentimiento y conocimiento previo por su parte, recoge la agencia Ical. Los investigadores comprobaron que el hombre no estuvo presente en la oficina donde se iniciaron los trámites de transferencia y cambio de titular del vehículo. Allí no recordaban haberle visto, pero sí a su expareja.
También se llevaron a cabo otro tipo de pesquisas para esclarecer los hechos: se cotejaron las rúbricas estampadas en los documentos oficiales presentados en la notaría con las personales del interesado, lo que demostró que no habían sido realizadas por la misma persona, y que las primeras, con un trazo distinto, habían sido falsificadas.
En dependencias policiales del Puesto de Buniel, la mujer fue investigada como presunta autora de un delito de falsificación de documento público, instruyéndose diligencias que fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción número 2 de Burgos, según informaron este miércoles fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
El acusado, que dejó de pagar el alquiler del inmueble, niega haberse apropiado de los objetos religiosos y afirma no saber qué es un retablo
El vehículo de los sospechosos era de alquiler y quedó completamente inutilizado después de estamparse contra la señal de tráfico
Una vez que las víctimas contactaban con ellos les exigían continuar la conversación a través de una aplicación desde donde les solicitaban una o varias transferencias para la reserva de los coches