Izquierda Unida de León y Ecologistas en Acción han emitido sendos comunicados en los que exigen la paralización de la tala en el bosque de ribera del río Torío, a la altura de Puente Castro, en la entrada del Camino de Santiago Francés a la ciudad.

Las agrupaciones acusan al equipo de Gobierno del Consistorio, formado por PSOE y UPL, con el consentimiento de la Confederación Hidrográfica del Duero, de perpetrar un "desastre ecológico" que, señala IU León "no es una excepción, sino un episodio más de una cadena de talas injustificadas y mal llamadas actuaciones de mantenimiento".

Una intervención como la de la ribera del río Torío, donde se trabaja con maquinaria pesada en el corte de vegetación, no solo de arbustos y árboles jóvenes de especies invasoras, sino en su mayoría de árboles adultos autóctonos, según apunta la doctora en biología de la conservación Sandra Goded Millán, en La Nueva Crónica, "destruye la biodiversidad y elimina la principal barrera contra las riadas". Una acción "sin criterio científico" que, al eliminar árboles vivos, destruye la permeabilidad del suelo y lo hace más susceptible de inundaciones en las crecidas del cauce.

Desde IU León, denuncian que esta tala "destruye ecosistemas consolidados, zonas de sombra y corredores verdes fundamentales para la biodiversidad y para el bienestar vecinal", y demandan una auditoría ambiental independiente sobre los daños causados en las inmediaciones del puente de piedra de Puente Castro, así como la revisión de los permisos otorgados por la CHD.

Ecologistas en Acción subraya que si la actuación se debe al mantenimiento del puente está "absolutamente sobredimensionada e injustificada", con el "agravante" de que se podría llegar a los 200 metros de destrucción de árboles, en ambas márgenes del río, según declaraciones de los operarios que proseguirán los trabajos hasta mediados del mes de octubre, recoge Ical.

El grupo ecologista solicita a la Confederación Hidrográfica del Duero y a la Junta que impongan sanciones al Consistorio de León por la "grave agresión ambiental" a un ecosistema fluvial, "hábitat de multitud de especies, acuáticas y ribereñas, de flora y fauna". Asimismo, IU León ha exigido un plan de restauración ecológica del bosque de ribera, con reforestación de especies autóctonas y participación de entidades vecinales y ambientales y transparencia y rendición de cuentas del Ayuntamiento de León, explicando quién ordenó la actuación, bajo qué criterios técnicos y con qué informes ambientales.