La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) de León ha denunciado la decisión de AB Azucarera de rescindir unilateralmente los contratos con varios remolacheros de la provincia, que afectan a la campaña 2025/2026, recoge EFE.

La multinacional alega que los cultivadores han "desatendido el cultivo" y que los rendimientos estimados son inferiores a los deseados. Azucarera justifica así la cancelación de contratos bajo la modalidad de cultivo compartido, un tipo de acuerdo en el que el arrendatario y el arrendador comparten costos y beneficios, y que garantizaba unos ingresos mínimos a los productores.

La organización agraria pone en duda los argumentos y apunta a la empresa como responsable de decisiones que podrían haber afectado a la producción y que nada tienen que ver con el desempeño de los agricultores. Deficiencias en el asesoramiento técnico, la elección de semillas utilizadas o las bajas dosis de abono recomendadas, podrían ser algunas de las causas del descenso del rendimiento del cultivo de remolacha en León.

Por este motivo, ASAJA considera que la decisión de la multinacional, que opera en un régimen de monopolio para la parte del sector de la región que no pertenece a cooperativas, es injustificada, no se ajusta a derecho y obliga a los trabajadores agrarios a aceptar acuerdos desfavorables con el fin de evitar largos y costosos procesos judiciales. AB Azucarera contempla únicamente esta vía, a través de los Juzgados de La Bañeza, como opción para solventar las disconformidades contractuales. Esto supone una "barrera" para los remolacheros, que no disponen de los recursos económicos ni del tiempo que "implicaría un litigio".

En este contexto, ASAJA ha solicitado la intervención del Gobierno autonómico mediante la "Junta de arbitraje y mediación para los contratos agrarios en Castilla y León". El colectivo de agricultores espera que la Junta tome parte en el conflicto y evite la desprotección de los productores frente a las imposiciones de la compañía.

La organización agraria demanda medidas por parte de las administraciones públicas que "protejan a los productores frente a posibles abusos". Asimismo, ha señalado que continuará ofreciendo asesoramiento legal a sus socios para defender sus intereses en esta coyuntura.

ASAJA advierte que este modus operandi empresarial puede "desincentivar la producción de remolacha, poner en riesgo el tejido agrario local y generar un clima de inseguridad jurídica que afecte a futuras campañas".

La nueva táctica de AB Azucarera en León se ha conocido poco tiempo después de que la empresa anunciara el cese de la relación contractual con los productores de remolacha en Andalucía. Ambas decisiones elevan la preocupación en el sector agrario y ponen en riesgo el futuro de este cultivo en España.