'La sociedad de la nieve' arrasa con doce premios Goya

No hubo demasiadas sorpresas en la gran noche del cine Español. Los Goya 2024, los Goya de Valladolid, coronaron a un Juan Antonio Bayona que se hizo con 12 de los 13 'cabezones a los que aspiraba. Un triunfo que entraba en las apuestas y que pone a 'La sociedad de la nieve' no solo en los altares de la filmografía española, sino también en la carrera de los Oscar que serán dentro de un mes exacto y donde competirá por dos estatuillas: 'Mejor Película Extranjera' y 'Mejor Maquillaje'. Solo un osado título se atrevió a arrebatarle un Goya a la película basada en la novela de Pablo Vierci. Fue 'Robot Dreams', la cinta de animación de Pablo Berguer, que se hizo con el premio al Mejor Guion Adaptado, además del de Mejor Película de Animación. Casualmente, este largo también está en la carrera por el premio de la Academia estadounidense. 

Tenía 15 nominaciones '20.000 especies de abejas', y se llevó tres galardones. Mejor Guion Original, Mejor Dirección Novel, a Estíbaliz Urresola, y Mejor Actriz, a Ana Gabarain. Así, con estas cuentas, poco margen quedó para el resto de películas, algunas de ellas también con muchas nominaciones. No fue tampoco sorpresivo el Goya al Mejor Actor, que recayó en David Verdaguer por su excepcional trabajo interpretando al humorista Eugenio en 'Saben Aquell'. 

Momentos emotivos

Tal y como estaba anunciado, hubo momento para recordar a la actriz vallisoletana fallecida recientemente, Concha Velasco. Ana Belén, junto con Los Javis, se lanzaron a cantar 'La chica yé yé' y 'Mamá quiero ser artista' en una actuación llena de color y alegría. Igualmente emotivo fue el momento en el que se recordó a todos los cineastas fallecidos en el último año. También cuando José Sacristán presentó el Goya de Honor, que este año recayó en Juan Mariné, uno de los mejores directores de fotografía del cine español. "¡Gracias por tus 90 años de dedicación y tus 140 películas! Cientotrés años de edad dan para mucho", dijo.

La reina de la noche

Asimismo, el Goya Internacional que en esta edición fue para Sigourney Weaver, quien levantó al público en alto con una gran ovación. J.A. Bayona, que dirigió a Weaver en 'Un monstruo viene a verme' en 2016, una película que acabó alzándose con nueve Goyas, fue el encargado de presentar a la "reina" de la noche. Sigourney Weaver recibió el cariño de todo el cine español visiblemente conmovida mientras su marido, el dramaturgo Jim Simpson, aplaudía a rabiar desde la platea. "Estoy sobrepasada"; dijo al acceder al micrófono, antes de esforzarse en español por dar las gracias a Jota Bayona, al que se refirió como "mi amigo, maestro del cine". "Qué profundo honor estar aquí esta noche con todos vosotros"; prosiguió en castellano mientras el auditorio se rompía en aplausos y ella daba las gracias "desde lo más profundo" de su corazón.

Valladolid, en la gala

El presidente de la Academia, Fernando Méndez-Leite, tuvo palabras para los ministros de Fomento y de Igualdad, Óscar Puente y Ana Redondo, "con quienes iniciamos esta aventura de los Goya en Valladolid"; deslizó, antes de agradecer también la colaboración para poner en marcha la gala del actual alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, y al equipo de su ayuntamiento, con quienes trabajaron "muy estrechamente" en la preparación de la gala.

Sobre Valladolid, "la ciudad de Miguel Delibes y sus santos inocentes", aseguró interrumpido por grandes aplausos, dio las gracias a sus ciudadanos, "entregados al cine desde siempre", además de agradecer la labor histórica que han desarrollado dos instituciones clave para la cinefilia en la ciudad: Seminci y la Cátedra de Cine de la Universidad, "que tanto han hecho y tan bien por el cine desde hace muchos años". Además, recordó a su "amiga de toda la vida" Concha Velasco y a la "gran directora" Patricia Ferreira, recientemente fallecidas.

Además, los actores vallisoletanos Fernando Cayo y Daniel Muriel salerieron al escenario haciendo gala de pucelanismo y recordando que Valladolid es ciudad de cine.

Noche reivindicativa

La gala discurrió entre glamour, música y mucho autoapoyo al cine español. Si bien, siempre hay tiempo para la reivindicación. Alba Flores, quien salió a entregar el premio a la Mejor Canción Original lanzó un "¡Viva Palestina Libre", un conflicto, el de Gaza, al que también hizo mención Estíbaliz Urresola, aduciendo que lo que está sucediendo en Palestina "es un genocidio". Hubo tiempo, por parte de la mayoría de las galardonadas, para sacar pecho del trabajo y la lucha de las cineastas españolas y con especial atención a los últimos casos de acoso en el mundo del cine. En este punto, fue Mabel Lozano quien alzó el discurso más claro frente a las agresiones que sufren las mujeres en todos los ámbitos, citando a Victor Hugo: "Decimos que la esclavitud ha desaparecido de la sociedad europea, pero no es cierto. La esclavitud solo se aplica a las mujeres y se llama 'prostitución'". 

Especialmente directo fue el momento en el que Pedro Almodóvar lanzó un mensaje claro contra las palabras de Juan García-Gallardo en la jornada anterior donde acusaba a los cineastas de ser "señoritos" que pretender "cobrar haciendo películas que luego nadie ve". El director respondió que le dice que el dinero que reciben en subvenciones se devuelve con creces al Estado a base de impuestos y crea miles de puestos de trabajo.